¿Sabías que puedes tener hongos en la boca?

Te cuento algo que nadie me dijo nunca: los hongos en la boca existen y pueden aparecerle a cualquiera. No es algo que solo le pase a las personas con problemas graves de salud o a los bebés. No. Cualquiera puede terminar con una infección por hongos en la boca sin siquiera darse cuenta. Lo sé porque lo viví, y si me lo hubieran explicado antes, tal vez me lo habría ahorrado.

 

Tipos de hongos que pueden aparecer en la boca

El más común y famoso es la Candida albicans. Suena a nombre de flor exótica, pero en realidad es un hongo que vive de manera natural en nuestro cuerpo, sin hacer mucho ruido. El problema aparece cuando, por alguna razón, se descontrola y empieza a multiplicarse más de la cuenta. Ahí es cuando aparece la candidiasis oral, que fue la que me tocó a mí.

Pero la Candida albicans no es la única que puede causar problemas en la boca. Existen otras especies del mismo género que también pueden hacer de las suyas, aunque son menos frecuentes. Por ejemplo, la Candida glabrata y la Candida tropicalis, que pueden afectar a personas con el sistema inmunológico debilitado, como aquellas que tienen diabetes, VIH, o que están pasando por un tratamiento con antibióticos o corticoides. Estas especies suelen ser más resistentes a los tratamientos y pueden ser un poco más difíciles de eliminar.

Aunque no son tan comunes, también hay otros hongos que pueden aparecer en la boca, como el Geotrichum candidum, que causa una infección llamada geotricosis, o algunas especies de Aspergillus, que pueden afectar a personas con defensas muy bajas. Sin embargo, la gran mayoría de los casos de hongos en la boca se deben a la Candida.

Si alguna vez te toca lidiar con una candidiasis oral, lo mejor es tratarla cuanto antes, porque puede volverse bastante molesta. Además, es una señal de que algo en tu cuerpo no está del todo equilibrado, así que siempre es bueno investigar la causa para evitar que vuelva a aparecer.

 

¿Cómo se pueden coger hongos en la boca?

Yo pensaba que solo se cogían en lugares húmedos, como las duchas de los gimnasios o las piscinas. Pero resulta que en la boca también tenemos las condiciones perfectas para que los hongos se reproduzcan: humedad, calor y un ecosistema lleno de bacterias y microorganismos.

 

Algunas de las causas más comunes son:

  1. Bajada de defensas: Si tu sistema inmunológico está bajo (por enfermedades, estrés o incluso falta de sueño), los hongos pueden aprovecharse.
  2. Uso de antibióticos: Los antibióticos matan bacterias, pero también pueden alterar el equilibrio natural de la boca y dejar vía libre para los hongos.
  3. Mala higiene bucal: No cepillarse los dientes bien o no limpiar la lengua hace que los hongos tengan un lugar perfecto para crecer.
  4. Prótesis dentales: Si usas dentadura postiza y no la limpias bien, los hongos pueden adherirse a ella.
  5. Diabetes: Un nivel alto de azúcar en la sangre puede favorecer el crecimiento de hongos.
  6. Tabaquismo: Fumar debilita la flora bucal y hace que los hongos tengan más facilidad para desarrollarse.
  7. Besar o compartir objetos: Sí, los hongos pueden transmitirse a través de besos o compartiendo cosas como cepillos de dientes, vasos o cubiertos.

 

¿Cómo saber si tienes hongos en la boca?

En mi caso, todo empezó con una sensación extraña en la lengua. No era dolor, ni picazón, pero sentía como si tuviera una capa pegajosa que no se iba, por más que me cepillara los dientes con ganas. Al principio pensé que era porque había comido algo pegajoso, pero cuando vi que seguía ahí al día siguiente, empecé a sospechar.

Luego llegaron las manchas blancas. Al principio parecían restos de yogur o leche cortada pegados en la lengua y el interior de las mejillas. Pensé que con un buen cepillado se irían, pero cuando intenté quitarlas, me di cuenta de que la piel de abajo estaba roja, irritada y hasta un poco dolorida. Fue ahí cuando me di cuenta de que algo no andaba bien.

Otro síntoma raro que tuve fue un gusto metálico en la boca. No era algo exagerado, pero cada vez que comía o bebía algo, sentía un regusto extraño, como si estuviera chupando una moneda. También noté que algunos alimentos, sobre todo los picantes o ácidos, me provocaban un leve ardor en la lengua y el paladar.

Otros síntomas que pueden aparecer incluyen sequedad en la boca, sensación de lengua áspera, grietas en las comisuras de los labios o, en algunos casos, dificultad para tragar si la infección es más intensa.

Si alguna vez notas algo así, lo mejor es ir al médico o al dentista cuanto antes para confirmar el diagnóstico y empezar un tratamiento de inmediato. Cuanto antes lo trates, más rápido desaparecerá y menos molestias tendrás.

 

Si notas alguno de estos síntomas, es posible que tengas hongos en la boca:

  • Placas blancas en la lengua, encías o interior de las mejillas.
  • Enrojecimiento o ardor.
  • Grietas en las comisuras de los labios.
  • Sensación de boca seca.
  • Pérdida del gusto o sabor metálico.

 

¿Se pueden contagiar los hongos de la boca?

La candidiasis oral no es tan contagiosa como un resfriado o una gripe, pero eso no significa que no pueda transmitirse. En mi caso, cuando me enteré de que tenía hongos en la boca, mi primera pregunta fue: «¿Puedo haber contagiado a alguien sin darme cuenta?» Y la respuesta fue: tal vez.

El hongo Candida albicans está presente en muchas personas sin causar problemas, pero, cuando hay una infección activa, la cantidad de hongos aumenta y las probabilidades de transmisión suben. ¿Cómo se contagia? Principalmente a través del contacto directo con la saliva. Es decir, si tienes candidiasis oral y besas a alguien, compartes cubiertos, vasos, pajitas o incluso muerdes la misma comida que otra persona, podrías pasarle el hongo.

No todas las personas que entran en contacto con el hongo van a desarrollar una infección. Si el sistema inmunológico de la otra persona está fuerte y su microbiota está equilibrada, lo más probable es que su cuerpo lo controle sin problemas. Pero si esa persona tiene las defensas bajas (por ejemplo, si ha tomado antibióticos recientemente, tiene diabetes, usa prótesis dentales o está pasando por mucho estrés), entonces sí podría desarrollar candidiasis.

Para evitar el contagio, lo mejor es no compartir objetos que entren en contacto con la boca hasta que la infección desaparezca. Y, por supuesto, mantener una buena higiene bucal, porque la acumulación de restos de comida y bacterias puede favorecer el crecimiento del hongo.

Si sospechas que puedes haber contagiado a alguien, lo mejor es que esa persona esté atenta a los síntomas y, si nota algo raro en la boca, consulte con un médico o dentista.

 

¿Cómo se eliminan los hongos en la boca?

Cuando fui al dentista, me recetó un antifúngico en enjuague y una crema para aplicar en la lengua. A los pocos días, los síntomas empezaron a mejorar.

Pero también me dio estos consejos para evitar que volviera:

  1. Mejorar la higiene bucal: Cepillar los dientes tres veces al día, usar hilo dental y limpiar bien la lengua.
  2. Usar enjuagues adecuados: Algunos enjuagues contienen clorhexidina o antifúngicos que ayudan a mantener la boca libre de hongos.
  3. Evitar el azúcar en exceso: Los hongos se alimentan de azúcar, así que reducir su consumo puede ayudar.
  4. No fumar: El tabaco altera la microbiota oral y favorece la proliferación de hongos.
  5. Desinfectar prótesis dentales: Si usas dentadura postiza, debes limpiarla bien todos los días.
  6. Cuidar el sistema inmunológico: Dormir bien, reducir el estrés y llevar una dieta equilibrada puede hacer la diferencia.

 

El papel del dentista

Los Dres. Lozano y López, expertos de la Clínica Polident, nos advierten que, si notas algo raro en tu boca, lo mejor que puedes hacer es ir al dentista cuanto antes, no dejarlo pasar.

Yo pensaba que solo servían para caries y limpiezas, pero pueden detectar infecciones, hongos e incluso enfermedades más graves. Cuando me diagnosticaron la candidiasis oral, me explicaron todo y me dieron el tratamiento adecuado. Si hubiera esperado más tiempo, la infección habría empeorado y podría haberse extendido a la garganta.

 

Lo que no sabías sobre los hongos en la boca

  • No solo aparecen en personas enfermas. Cualquiera puede tenerlos.
  • Se pueden evitar con buenos hábitos de higiene y salud general.
  • No siempre duelen. A veces solo causan molestias leves y pasan desapercibidos.
  • Pueden aparecer tras un simple tratamiento con antibióticos.
  • El yogur con probioticos puede ayudar a prevenirlos porque equilibra la flora oral.
  • Si no se tratan, pueden extenderse a otras partes del cuerpo, como la garganta o el esófago.

 

Como ves, no es algo a lo que no hacerle caso

Es de esas cosas que crees que les pasa a otros, hasta que te toca a ti. Ahora sé que una buena higiene y el cuidado general de la salud son clave para prevenirlos.

Si alguna vez notas algo raro en tu boca, no lo ignores. Puede ser algo simple, pero también podría ser una infección que necesita tratamiento. Mejor prevenir que lamentar.