Si me hubieran dado un euro (o una moneda de 100 pesetas para los más antiguos) las veces que alguien me ha dicho eso de “mi sueño es irme a vivir a un pueblo de 20 habitantes” ahora mismo sería millonario. Y es que es la frase más manida del mundo. Ahora bien, entre lo que se dice y lo que se hace siempre hay mucha distancia. Y más si hablamos del mundo rural. Todos estamos dispuestos a irnos un fin de semana o durante las vacaciones de verano a un pueblo para desconectar del estrés del día a día y del trabajo. Pero luego, nos damos cuenta de que el día a día es muy duro, y, sobre todo en invierno.
Yo tengo un pueblo de 1000 habitantes y así lo he comprobado. Cuando estás durante un par de días todo es tranquilidad, relax, ir a tomar una caña con los amigos al bar del pueblo con precios populares, dar un paseo y oler a pueblo. Ahora bien, los días pasan y te vas dando cuenta de que el sueño se convierte en pesadilla. De repente te das cuenta de que los inviernos son muy duros, de que el frío es constante y que no tienes los medios en tu casa. Un día te pones malo, quieres ir al médico y no puedes porque el servicio es cada tres días. Otro día quieres hacer planes de futuro y ves que no hay colegio para tus hijos. O simplemente quieres hacer una gestión por Internet y no tienes conexión.
Por eso, hoy os quiero hacer un análisis de lo que la experiencia me ha dicho. Si me quiero ir a vivir a un pueblo hay una serie de cosas que hay que tener. De lo contrario de nada servirá eso de que hay que apostar por la España Vaciada y poblar nuestros pueblos, frases que a los políticos se les da muy bien decir pero que luego no son ciertas.
Lo primero, como pasa en el mundo urbano, hay que tener una vivienda digna. Una casa donde vivir es esencial. Puede ser propio o alquilado, pero claro, tiene que contar con prestaciones, del tipo de baños, habitaciones y que no haya ni goteras ni problemas de humedad. Y como suele pasar, de nada sirve tener una casa si no tenemos trabajo. Un medio de vida es fundamental para vivir en un pueblo. Si no hay trabajo disponible en el pueblo, se necesitará transportarse a otras áreas para trabajar. Por lo tanto, los ayuntamientos de los pueblos tienen que apostar por crear empleo. Yo creo que a partir de tener trabajo, la gente se irá quedando.
Y una vez que estamos establecidos en el pueblo es el momento de contar con servicios. De nada me sirve vivir en el pueblo si luego me tengo que ir a comprar a la ciudad. Un pueblo necesita una tienda de comestibles, supermercado, o mercado donde se puede abastecer de alimentos, que es lo básico.
Una forma de transporte es importante si uno necesita moverse de un lugar a otro. Por eso necesitamos contar con autobús, tres o cualquier tipo de conexión. Y como te decía, hay que contar con servicios de salud, como un centro médico o una farmacia. No podemos estar pendientes de una visita. Sé que es complicado, sobre todo en zonas como Castilla y León, donde hay tantas zonas. Lo mismo pasa con la educación, porque como he dicho antes, las escuelas y colegios son importantes para que los niños reciban educación de calidad y se puede fijar población.
Conexión a internet
Lo he dejado casi para el final pero creo que es algo básico. Vivir en un pueblo no quiere decir vivir como en la Edad Media, y es que en un pueblo se puede seguir teniendo conexión con la tecnología. Además es básico. A medida que las tecnologías cambian, se requiere tener una buena conexión a internet para trabajar y estudiar. El simple hecho de tener que hacer una gestión o un papeleo con la administración se tiene que hacer con conexión. Por eso, cuando nos hacemos clientes de una compañía de telefonía móvil tenemos que estar atentos a la conexión que presta, como en el caso de Oroc, que se responsabiliza de tener una conexión asegurada. Y por supuesto, comprobar si el servicio de fibra está disponible en esa población.
Y por último, si me voy a vivir a un pueblo quiero tener seguridad. Y es que residir en un área segura es importante para una vida tranquila para la familia y más si tenemos niños y niñas. Es importante conocer las medidas de seguridad y mantenerse informado de los cambios en la seguridad del pueblo, un ayuntamiento tiene que aportar su granito de arena.
